Hoy más que nunca, en estos tiempos en los que nos ha tocado vivir y con todo lo que está pasando, es necesario enfrentarse a la adversidad, y muchos creemos que la única manera de salir fortalecidos de una situación es pensar que es superable.
Pues bien, leí hace ya algún tiempo un artículo muy interesante de Rocío Navarro Macías (La Vanguardia) en el que se cita a Joan Piñol (psicólogo) y Natalia Martín María, directora del curso Experto Universitario en Psicología Positiva y coordinadora del Máster Universitario en Psicología General Sanitaria de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), y en el que se exponían 5 técnicas para cultuvar la esperanza, técnicas que me parece adecuado traer aquí hoy:
1. Plantearse objetivos realistas
La esperanza se sustenta sobre una meta futura, por lo que plantearse objetivos está ligado a ella de forma inherente. Podemos decidir sobre lo que está por llegar y realizar cambios. Lograrlo implica confiar en la capacidad personal de transformación, pero teniendo en cuenta que en el camino aparecerán obstáculos y se producirán errores.
Según un estudio realizado por Charles Richard Snyder, las personas con esperanza pueden "anticipar estas barreras" y "eligen" los caminos correctos, ya que cuentan con una mayor resiliencia y orientan su comportamiento hacia la consecución de sus objetivos.
Una pregunta interesante es: ¿Cómo te gustaría ser dentro de cinco años? Visualízalo y decide qué necesitas para llegar allí. Siempre hay algo más que se puede intentar.
Asimismo es importante que las metas sean realistas, porque no se trata de cultivar una esperanza ciega, ni de ignorar los obstáculos y las dificultades, porque entonces seríamos unos insensatos. Se trata de una esperanza realista y prudente, basada en los hechos que van aconteciendo.
2. Tomar el control (de lo que se pueda)
Es recomendable observar honestamente qué ámbitos de la vida están bajo el control personal y cuáles no. Se trata de focalizar la atención únicamente en aquello que depende de uno mismo.
La crisis sanitaria ha demostrado que el control también se deriva de la experiencia. Uno tiene esperanza cuando ve que puede controlar la situación. Después de pandemia, por ejemplo, los médicos ahora saben mejor cómo actuar cuando llega un enfermo de covid a la UCI, por ejemplo, y eso genera optimismo y esperanza.
3. Agradecer para fomentar el optimismo
El optimismo en su justa medida es deseable y necesario para fomentar la esperanza. Piñol utiliza una técnica basada en el primero que ayuda a conseguir la segunda. Se trata de llevar un diario y escribir, cada día, tres cosas que hayan ocurrido y por las que estar agradecido, lo que permite aprender a vivir con más optimismo.
4. Gestionar la atención
Las personas optimistas son expertas en dirigir la atención hacia aquello que les reporta sensaciones positivas. Los que sienten esperanza no lo hacen tanto en esa dirección, aunque sí dedican menos tiempo a información que consideran triste o amenazante, según indica el estudio Optimismo, esperanza y atención para estímulos emocionales.
Por ello, y ante un entorno mediático altamente diversificado, para desarrollar la esperanza no es necesario consumir únicamente información positiva, sino evitar los mensajes más negativos.
5. Buscar apoyos
Mantener o fomentar la esperanza en soledad es tarea dura. Sin embargo, el entorno social puede ofrecer el sostén necesario para sobrellevar las situaciones más desafiantes. Una buena red de apoyo puede ayudarte en los momentos difíciles; no tienes por qué enfrentarte a ellos en soledad. Además, contar con perspectivas diferentes puede contribuir a encontrar soluciones novedosas para tus problemas.
No obstante, no elegir a las personas adecuadas puede revertir esta situación. Es necesario contar con quienes apoyan y reafirman los motivos sobre los que se mantiene la esperanza.
Excelente
"Por ti las flores…
Tengo Sueños, abruptamente cuerdos
que mi privada espada no concibe:
por ti la pluma horada y me derribe,
cadencia al escultor de tus acuerdos…
Tengo sueños, estando en tu mirada,
donde quilla y chalupa de mi barca
alude al Cielo, éste su Monarca,
y priva mi retoño a Enamorada…
Por ti las flores vuelan del navío,
y se esparcen contigo en el verano
que la mañana en lluvia desde el río,
no va a buscar sin ti, para tu mano…
Premura, no sosiego, tarde vana,
intonsamente helada busca en fiesta-
contigo, del mayor ángel si gana,
primera, no la flor sin agua, testa…
No manso corazón, frío Verano,
la pluma emerge clara desde el púlpito
así corazón ceda de tu mano,
roto el fulgor asedia de mi pálpito…!
Prisión desnuda, tus ojos en noche,
orienta mi pantera doblegada:
que si la sombra espera tu mirada
refulgen dos silencios en derroche…
Por ti, por ti amanezco en mi desvelo,
y alude tu virtud, mi ladronzuelo:
que roba toda Luz al Monasterio
donde cavila tu alma Sol, Misterio!
De tu vergel, la noche destilada
amanece fragante por si esposa
alba, candil, de llama ensimismada,
que no la Ofrenda a tus ojos virtuosa…
Cálida no ya siente mi amargura
si tu pelo describe de su Oro;
no el llanto atavía no la premura,
de tu boca nocturna, sí el Tesoro…
Anonada la cumbre de tu boca:
por si Estrella tu joven Voz promete
es privada función de un clarinete,
el murmullo del mar, contra la roca…
Tengo sueños que invitan al Oriente,
Bellezas sueñas tú, sueña tu mente…"
Carl'
Me lo apunto
👍👍