Estos curiosos peces, pertenecientes a la gran familia de peces exocétidos (Exocoteidae) en la que podemos encontrar más de 70 tipos de especies divididas entre siete o nueve géneros distintos, aún por determinar, pueden verse saltando fuera del agua en los mares cálidos (tropicales y subtropicales) de todo el mundo.

Al nadar, adquieren bajo el agua la suficiente velocidad (hasta 60 km/h) como para saltar y planear sobre ella cientos de metros, haciendo parecer como si volaran.

Yo los he visto algunas veces en viajes que he hecho en barco, y siempre me han parecido curiosos. De unos 30 cm de longitud y forma de torpedo aerodinámicamente perfecta, sus grandes aletas les permiten salir del agua y sobrevolar el aire durante un tiempo relativamente largo.

Por lo que he leído de ellos, hay especies de "2 alas" que son aquellas que poseen sobre todo las aletas pectorales muy desarrolladas y por otro lado, tenemos especies de “4 alas”, que tienen tanto las aletas pectorales como las pélvicas muy fuertes y amplias.

Estos curiosos peces han evolucionado para planear de esta forma para escapar de depredadores como el atún, la caballa o el pez espada, entre otros muchos. Pero el peligro para estos peces no sólo viene del mar, sino también del aire, ya que al salir del agua, los peces voladores se exponen también a las aves marinas.

Al salir del agua, pueden alcanzar una altura de varios metros y planear en el aire hasta los 200 metros (aunque se han observado "vuelos" de hasta 400 metros), una distancia nada desdeñable teniendo en cuenta que carecen de alas (son aletas). Para lograrlo, los peces voladores son capaces de agitar su aleta caudal más de cincuenta veces por segundo.

Como curiosidad, decir que las huevas estos peces voladores son muy codiciadas en el mercado asiático, sobre todo en Japón, donde se utilizan para elaborar sushi.