Significa ‘Cerro de cal’ en lengua Quechua, y es un yacimiento cretácico ubicado en el departamento boliviano de Chuquisaca (cerca de Sucre).
Fue descubierto por los trabajadores de la empresa cementera nacional de Bolivia.
De unos 80 metros de altura y 1.200 metros de largo, dentro de este área se han logrado identificar aproximadamente 5.055 huellas de dinosaurios, la mayor concentración de huellas de dinosaurios del mundo. Es impresionante, y si encontrar la huella de un dinosaurio que vivió hace millones de años ya es bastante emocionante, imagina encontrar miles de ellas en el mismo lugar.
Las huellas crean un dibujo marcado por los diferentes rastros entrecruzados.
Gracias a estas huellas, los paleontólogos han sido capaces de identificar algunos de los diversos tipos de dinosaurios que habitaban la zona (anquilosaurios, Tyrannosaurus rex , ceratops, titanosaurios, etc...), y que dejaron sus huellas sobre la blanda arcilla, conservándose los rastros cuando la arcilla se solidificó en periodos secos...
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