Portugal es un país que me encanta, sus ciudades, su gastronomía y sus gentes, es por eso por lo que vale la pena destacar algunas curiosidades acerca de su hermosa capital, Lisboa, conocida también como la "Ciudad de las Siete Colinas" (Santa Catarina, Estrela, Penha de França, San Pedro de Alcántara, Castelo, Graça y Monte).

Esta ciudad tiene 2 monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad por las UNESCO, la Torre de Belem y el Monasterio de los Jerónimos, ambos imprescindibles si visitan esta bella capital.

Es muy posible que si han estado alguna vez en Lisboa se hayan montado en su red de tranvías, encantadores sin duda. Pues bien, han de saber que su red de tranvías amarillos tiene más de un siglo de historia (el emblemático tranvía 28, prácticamente llega a todos los puntos de interés de la capital portuguesa).

Todo aquel que haya estado en Lisboa conoce sus encantadoras (y en muchos casos empinadas) calles adoquinadas, y el origen de ello lo encontramos tras el terrible terremoto de 1755 que afectó de forma muy grave esta ciudad. Por entonces, el Marqués de Pombal dispuso que se reutilizaran los escombros de los edificios derrumbados convirtiéndolos en adoquines con los que asfaltar las aceras.

De hecho, este terremoto, el más potente en la historia de Europa (tuvo una duración de 8 minutos, y que fue seguido además de un tsumani con una ola de 15 metros que arrasó toda la Baixa) fue el responsable de que hoy en día, el centro de la ciudad carezca de edificios de estilo Manuelino, estilo arquitectónico típico de la arquitectura portuguesa y que se caracteriza por combinar elementos decorativos del gótico con elementos del mar como cuerdas, nudos marineros, corales o animales y plantas de la época de los grandes navegantes.

Algo que me contaron hace un tiempo es que suele llamarse cariñosamente a los lisboetas "alfacinhas", que viene a significar algo así como “lechuguitas”, ya que antiguamente la ciudad fue conocida como productora de lechugas (si algún lisboeta lee esto podrá confirmárnoslo o negárnoslo, jiji).

Si han visitado en esta ciudad alguna vez la estatua del Cristo Rey, que sepan que es una copia del Cristo Redentor de Río de Janeiro (Brasil), y esto es porque cuando a principios del siglo XX el Cardenal de Lisboa viajó a Río, quedó impresionado por la inmensa escultura y a su vuelta a Portugal comenzó a recaudar fondos para erigir una igual en Lisboa.

El área de la Gran Lisboa cuenta con el puente más largo de Europa, el Vasco de Gama, con más de 17 km de longitud (es una preciosidad además).

¿Han probado los famosos pasteles de nata portugueses? Si tienen oportunidad prueben los que se hacen en el lugar donde nacieron, según tengo entendido, la Antiga Confeitaria de Belém (son una delicia, ¿de receta secreta? dicen que sólo la conocen 5 personas, que no pueden viajar a ningún sitio juntas). Aqui en VICMUN he visto un video con esta receta, sin duda para tenerla en cuenta jeje.

Una de las pazas más importantes de la ciudad, la Plaza Don Pedro IV  según nombre oficial, es llamada del Rossio por los lisboetas (así que no pregunten si van por la Plaza Don Pedro IV, ya que no todos la conocen por ese nombre, es un ejemplo de algo que ocurre en muchas ciudades del mundo.

Otra curiosidad es que el estuario del Tajo es el puerto natural más grande de Europa, de hecho, es la mayor zona húmeda de Portugal y de Europa occidental. 

La actual Iglesia de Santiago, a los pies del Castillo de San Jorge, es el edificio donde se casó Cristóbal Colón.

Lisboa tiene además una estatua de un rey, Don Pedro IV, que reinó sólo durante 54 días, uno de los reinados más cortos de la historia de Portugal, pero en esos 54 días dio tiempo a redactar la carta constitucional de Portugal y también fue el primer emperador de Brasil según tengo entendido.

No olviden visitar si llegan hasta esta bella ciudad el Hospital de Muñecas, si si, un hospital en el que reparan muñecas, el más antiguo de Europa (no sabía que hubiera más) y único en su estilo, ya que reparan todo tipo de muñecas, desde Barbies hasta muñecas de época.

Aqui se halla una de las librerías más antiguas del mundo seguramente, la librería Bertrand, por lo menos está acreditada por el libro Guinness de los récords como la más antigua de Lisboa. Lleva funcionando desde 1732.

Por último, que sepan que Lisboa es la capital europea del Street Art, pionera en usar este tipo de arte para impulsar zonas urbanas deprimidas.

Sin duda con todo esto convendrán conmigo en que es un destino fundamental para visitar... :)