Es el conocido como Arco Gateway, situado en la orilla del Río Mississippi, en la ciudad de Saint Louis, en el Estado de Missouri, en los Estados Unidos, y con sus casi 200 metros de altura es el monumento más alto del mundo construido por el hombre.

Inaugurado en 1968 y construído de hormigón y acero, este monumento es impresionante, ya que tiene una altura y una longitud de base de 192 metros, lo que equivale a un edificio de 60 plantas. Existe además un centro para visitantes subterráneo situado justo debajo del arco.

Fue construído en conmemoración de la expansión hacia el oeste de Estados Unidos, y además de ser el monumento más alto construido por el ser humano, es el edificio accesible más alto del estado.

Es tan grande que en su parte superior hay un observatorio arqueado con un conjunto de 32 ventanas, 16 a cada lado. Para acceder a esta zona del arco existen dos conjuntos de escaleras de emergencia de más de 1.000 escalones cada una, un ascensor y dos tranvías formados por 8 compartimentos cada uno. Cada compartimento tiene una capacidad para 5 personas.

Es capaz de aguantar terremotos intensos y resistir grandes rachas de viento, pudiéndose desplazar hasta 23 centímetros en cualquier dirección.

Un prodigio de ingeniería...