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El soldado británico que pudo matar a Adolf Hitler

El soldado británico que pudo matar a Adolf Hitler

La historia de Henry Tandey, el soldado británico que presuntamente perdonó la vida de Adolf Hitler durante la Primera Guerra Mundial, ha sido motivo de especulación durante décadas. Si bien es un relato lleno de controversia y dudas, este evento se ha mantenido en el imaginario popular debido a las implicaciones que pudo haber tenido. A continuación voy a contarles la historia, su contexto histórico, las supuestas evidencias dek hecho en sí y la repercusión que tuvo tanto en la vida de Tandey como en la historia mundial.

Contexto histórico: La Gran Guerra y el surgimiento de Hitler

Para entender mejor este encuentro, primero debemos situarnos en el contexto de la Primera Guerra Mundial, un conflicto que devastó Europa entre 1914 y 1918. La guerra fue el resultado de tensiones políticas, económicas y territoriales entre las grandes potencias europeas, y se caracterizó por una guerra de trincheras brutal que dejó millones de muertos y heridos.

Adolf Hitler, quien años después se convertiría en el dictador de la Alemania nazi, era en ese momento un joven soldado alemán. Hitler sirvió como cabo (Gefreiter) en el Regimiento de Infantería Bávaro N.º 16 y fue uno de los muchos hombres atrapados en la guerra de trincheras en el Frente Occidental. Como muchos soldados de su tiempo, Hitler experimentó de primera mano la brutalidad del conflicto, siendo herido en varias ocasiones y condecorado por su valor.

Por otro lado, Henry Tandey fue uno de los soldados británicos más condecorados de la Primera Guerra Mundial. Nació en Leamington, Warwickshire, en 1891 y se alistó en el ejército en 1910. Durante la guerra, sirvió en el Regimiento del Duque de Wellington, y su valentía en el campo de batalla le valió varias medallas, incluida la prestigiosa Cruz Victoria, el mayor honor militar en el Reino Unido. Tandey fue reconocido por salvar a varios de sus compañeros bajo fuego enemigo y liderar asaltos en trincheras enemigas.

El supuesto encuentro: Marcoing, 1918

La parte central de esta historia se sitúa en septiembre de 1918, en la ciudad francesa de Marcoing, durante la fase final de la Primera Guerra Mundial. El 28 de septiembre, las fuerzas británicas estaban avanzando contra el ejército alemán, y Henry Tandey estaba liderando una patrulla. Durante este avance, Tandey se topó con un soldado alemán herido que intentaba escapar del caos de la batalla.

Según el relato que surgiría años después, ese soldado alemán era Adolf Hitler. El encuentro, tal como se narra, fue breve pero significativo. Hitler, exhausto y desarmado, vio a Tandey apuntándole con su rifle. En ese momento, ambos hombres cruzaron miradas. Sin embargo, en lugar de disparar, Tandey decidió bajar su arma y perdonarle la vida. Se dice que Hitler agradeció el gesto inclinando la cabeza antes de alejarse.

Este acto de compasión, si es cierto, habría sido un evento crucial que podría haber cambiado el curso de la historia. Si Tandey hubiera disparado, Hitler habría muerto en ese campo de batalla y no habría tenido la oportunidad de liderar el Partido Nazi, iniciar la Segunda Guerra Mundial ni perpetrar los horrores del Holocausto.

Este episodio no salió a la luz hasta 1938, cuando el primer ministro británico, Neville Chamberlain, visitó a Adolf Hitler en su residencia en Berghof, los Alpes bávaros. En el contexto de las tensiones crecientes en Europa por las ambiciones expansionistas de Hitler, Chamberlain intentaba apaciguar al dictador alemán para evitar una guerra.

Durante esa visita, Hitler mostró a Chamberlain una pintura de Fortunino Matania, que representaba a soldados británicos ayudando a los heridos durante la Batalla de Menin Road en 1914. Hitler señaló a uno de los soldados en la pintura y, según algunos testimonios, le comentó a Chamberlain que ese era Henry Tandey, el hombre que le había perdonado la vida en 1918.

Este relato sorprendió a Chamberlain y más tarde se lo comunicó al gobierno británico. A partir de este momento, la historia del encuentro entre Tandey y Hitler comenzó a difundirse en círculos más amplios. Aunque nunca hubo una confirmación oficial de este evento por parte de Tandey, el relato se arraigó en la cultura popular.

¿Realidad o mito?

Uno de los aspectos más intrigantes de esta historia es la falta de pruebas concluyentes. Aunque la narrativa ha perdurado a lo largo de los años, existen serias dudas sobre su veracidad.

  • Falta de documentación militar: No existen registros claros que confirmen que Hitler estuvo en Marcoing el mismo día que Henry Tandey. Los movimientos de los regimientos alemanes y británicos en la zona hacen que sea posible, pero no hay pruebas que lo certifiquen.

  • Narrativa posterior de Hitler: Muchos historiadores sugieren que Hitler podría haber inventado o exagerado esta historia para construir una narrativa heroica y mística sobre su supervivencia. Hitler era conocido por utilizar eventos de su vida para crear una imagen pública que reforzara su liderazgo y carisma.

  • Tandey nunca confirmó la Historia: Henry Tandey, aunque sabía de esta historia, nunca la confirmó plenamente. En entrevistas posteriores, mostró escepticismo sobre si el soldado al que perdonó la vida era realmente Adolf Hitler. Sin embargo, tampoco negó rotundamente que pudiera haber sido él.

  • Análisis historiográfico: Desde un punto de vista historiográfico, este tipo de relatos, especialmente en la vida de figuras como Hitler, suelen mezclarse con mitos y leyendas. La historia, por su atractivo narrativo, ha sido reproducida en diversas formas, lo que dificulta separar los hechos de la ficción.

La vida de Henry Tandey después de la guerra

Independientemente de la veracidad de este episodio, Henry Tandey fue un héroe de guerra. Recibió múltiples condecoraciones, entre ellas la Medalla Militar y la Cruz de la Victoria, por su valor y heroísmo. Tras el final de la Primera Guerra Mundial, Tandey regresó a la vida civil y trabajó en varias ocupaciones, entre ellas como vigilante en una fábrica en Coventry.

A pesar de la fama que le trajo esta historia, Tandey vivió una vida tranquila y no buscó atención mediática. Se le describía como una persona modesta, consciente del horror de la guerra y poco inclinada a alimentar especulaciones sobre su encuentro con Hitler. Falleció en 1977 a los 86 años.

¿Qué habría pasado si Hitler hubiera muerto?

Una de las preguntas más fascinantes derivadas de esta historia es: ¿qué habría pasado si Henry Tandey hubiera disparado a Hitler en 1918? Este tipo de especulación histórica, conocida como historia contrafactual, nos invita a imaginar un mundo donde Adolf Hitler no hubiera sobrevivido a la Primera Guerra Mundial.

Posibles consecuencias inmediatas: Si Hitler hubiera muerto en 1918, es posible que el Partido Nazi no hubiera llegado al poder en la Alemania de los años 30. Aunque el país estaba en una situación de caos económico y político, Hitler fue una figura clave para el ascenso del nazismo. Sin su liderazgo carismático y sus habilidades oratorias, el Partido Nazi pudo no haber alcanzado el mismo éxito.

Eliminación del Holocausto y la Segunda Guerra Mundial: El ascenso de Hitler y la ideología nazi llevaron directamente a la Segunda Guerra Mundial y al Holocausto. Si Hitler hubiera sido eliminado antes de que tomara el poder, millones de vidas podrían haberse salvado, y el curso de la historia mundial habría sido muy diferente.

La inestabilidad de Alemania: Sin embargo, algunos historiadores argumentan que incluso sin Hitler, Alemania podría haber caído en manos de otro líder extremista debido a las tensiones creadas por el Tratado de Versalles, la crisis económica y el resentimiento popular. El ambiente estaba listo para que surgiera un líder nacionalista, aunque no necesariamente con las mismas características que Hitler.

La historia de Henry Tandey y Adolf Hitler es uno de esos relatos que nos obligan a reflexionar sobre el papel del azar y las decisiones individuales en la historia. Aunque no sabemos con certeza si Tandey realmente perdonó la vida de Hitler, la posibilidad de que un solo acto de compasión en el campo de batalla pudiera haber cambiado el curso del siglo XX es profundamente impactante. Al final, Henry Tandey será recordado no solo como un héroe de guerra, sino también como una figura envuelta en uno de los mayores "¿y si?" de la historia.

Comentarios (1)

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davdom • Hace 8 meses, 1 semana

si fuera cierto, la de líos que nos hubiéramos ahorrado...