Esta es la típica excentricidad que sólo podía venir de Oriente, jeje.

Esta imponente cascada artificial, alabada a la par que criticada, y de 108 m de altura, nace de un rascacielos, el conocido como Liebian International Plaza, en la ciudad de Guiyang (provincia de Guizhou, en China), edificio que también alberga un hotel, oficinas y un centro comercial.

Construída por Ludi Industry Group, la idea al hacerlo fue la de promover la imagen ecológica de la ciudad de Guiyang, aunque algunos critiquen el proyecto por el despilfarro en energía eléctrica y agua, de ahí que la usen poco.

En esta provincia china, además, parece que cuentan también con el puente más alto del mundo y el radiotelescopio de plato único más grande del planeta (les gusta destacar :)).

En realidad, esta cascada, pese a ser muy espectacular cuando la conectan, sólo lo está en ocasiones especiales y no por mucho tiempo, básicamente porque el coste de mantenerla funcionando tan sólo 1 hora supone alrededor de 120 $ (dicen que si permaneciera encendida durante todo un año, supondría un coste de alrededor de 1 millón de $, así que más vale que no se dejen la llave de paso abierta!).

Un tanque gigante ubicado en el suelo recoge el agua de lluvia que se utiliza para la cascada, necesitándose unas 2 horas para preparar su funcionamiento, que será impulsado por 4 bombas de agua.

Original es...