Adler Berriman "Barry" Seal (16 de julio de 1939 – 19 de febrero de 1986) es una figura cuya vida parece sacada de una novela de espionaje, pero que está profundamente arraigada en hechos reales que entrelazan el narcotráfico, la Guerra Fría y las operaciones encubiertas de la CIA. Piloto prodigio, contrabandista, mercenario y, finalmente, informante, la historia de Seal es un torbellino de ambición, riesgo y tragedia. Veamos a continuación una recopilación completa de su vida, con datos curiosos que resaltan su complejidad y el impacto de sus acciones.

Los inicios: Un talento innato para volar

Nacido en Baton Rouge, Luisiana, en 1939, Barry Seal mostró una fascinación por los aviones desde muy joven. A los 15 años ya realizaba vuelos en solitario, y a los 16 obtuvo su licencia de piloto, convirtiéndose en uno de los más jóvenes de Estados Unidos en lograrlo. Su talento natural lo llevó a trabajar como piloto comercial para Trans World Airlines (TWA), donde a los 26 años se convirtió en el capitán más joven en pilotar un Boeing 707 y, más tarde, un 747. Su instructor de vuelo lo describió como un "piloto nato", una habilidad que definiría su vida.

• Dato curioso: El padre de Barry, Benjamin Curtis Seal, era un mayorista de caramelos y miembro del Ku Klux Klan, lo que da un vistazo al entorno conservador y controvertido en el que creció el joven piloto.

De piloto comercial a contrabandista

A finales de los años 60, durante el auge del movimiento hippie y las protestas contra la Guerra de Vietnam, Seal comenzó a incursionar en el contrabando de marihuana, aprovechando sus habilidades como piloto y sus viajes frecuentes a Sudamérica. Lo que empezó como un negocio modesto pronto escaló cuando, a finales de los 70, conoció a los hermanos Jorge Luis, Fabio y Juan David Ochoa, socios clave de Pablo Escobar en la fundación del Cartel de Medellín. Seal se convirtió en el "piloto oficial" del clan Ochoa, transportando toneladas de cocaína desde Colombia a Estados Unidos, lo que lo hizo inmensamente rico, con una fortuna estimada en más de 50 millones de dólares de la época.

• Dato curioso: Seal era conocido como "el gringo que siempre cumple" por su confiabilidad y audacia. Llegó a poseer una flotilla de aviones, incluyendo un jet Lear, helicópteros, aviones militares de carga y dos buques con equipos de navegación de última generación, como los usados en submarinos nucleares.

Reclutado por la CIA

En los años 70, la CIA notó las habilidades de Seal y lo reclutó para operaciones encubiertas en Centroamérica, en el contexto de la Guerra Fría y la lucha contra el comunismo. Su primera misión fue sobrevolar los campos de entrenamiento de los sandinistas en Nicaragua para tomar fotografías aéreas. Más tarde, se involucró en el transporte de armas para la Contra, un grupo rebelde anticomunista respaldado por Estados Unidos. Estas operaciones a menudo se entrelazaban con sus actividades de narcotráfico, ya que Seal usaba los mismos aviones para llevar armas a Centroamérica y regresar con cocaína a Estados Unidos, presuntamente con el conocimiento de la CIA.

• Dato curioso: Hay especulaciones de que Seal estuvo vinculado a operaciones más oscuras, como la Operación 40, un supuesto escuadrón de asesinatos de la CIA. Una foto de 1963 lo muestra junto a Porter Goss, futuro director de la CIA, en México, aunque estas afirmaciones carecen de pruebas sólidas.

La caída: Arresto y conversión en informante

En 1983, durante la Operación Screamer de la DEA en Florida, un amigo de Seal lo delató, lo que llevó a su arresto en Fort Lauderdale por lavado de dinero y contrabando de Quaalude (metacualona). Enfrentado a una larga condena, Seal negoció un acuerdo con la DEA: a cambio de no ir a prisión, se convirtió en informante y comenzó a proporcionar información sobre el Cartel de Medellín. Su colaboración fue tan valiosa que el periódico Philadelphia Inquirer lo llamó "el testigo más importante en la historia de la DEA".

Seal participó en operaciones encubiertas, incluyendo la instalación de cámaras en sus aviones para documentar las actividades del cartel. En 1984, durante un vuelo a Nicaragua, capturó imágenes de Pablo Escobar y Gonzalo Rodríguez Gacha cargando cocaína junto a militares sandinistas en el aeropuerto de Managua. Estas fotos, filtradas a la prensa por la administración Reagan, desataron un escándalo internacional al vincular al gobierno sandinista con el narcotráfico.

• Dato curioso: Las fotos de Escobar en Nicaragua fueron un punto de inflexión, pero también sellaron el destino de Seal. Cuando su identidad como informante se filtró en un artículo de primera plana de Edmond Jacoby, quedó expuesto ante el cartel.

El escándalo Irán-Contras

En el apogeo del escándalo Irán-Contras, Seal reveló que la CIA había financiado a la Contra nicaragüense con recursos provenientes del narcotráfico, una acusación que sacudió a la administración Reagan. Estas revelaciones lo convirtieron en una figura aún más peligrosa para sus antiguos socios y para ciertos sectores del gobierno estadounidense, ya que amenazaba con exponer operaciones encubiertas de alto nivel.

• Dato curioso: Seal testificó que su operación de contrabando en Mena, Arkansas, incluía tecnología avanzada, como radios de ultra alta frecuencia, criptógrafos y equipos de navegación por satélite, comparables a los de los B-52 de la Fuerza Aérea.

La traición y el trágico final

La filtración de su identidad como informante marcó a Seal como objetivo del Cartel de Medellín. Pablo Escobar, sintiéndose traicionado, ordenó su asesinato. El 19 de febrero de 1986, Seal fue acribillado en su Cadillac en Baton Rouge por sicarios colombianos contratados por los hermanos Ochoa, usando una ametralladora Ingram Mac-10. Dos de los sicarios, Miguel Vélez y Luis Carlos Quintero-Cruz, fueron condenados a cadena perpetua en Estados Unidos.

• Dato curioso: Fernando Arenas, un expiloto del narcotraficante Carlos Lehder, afirmó en una entrevista en el 2000 que los Ochoa consideraban a Seal como un "hermano mayor" y que su traición fue vista como una ofensa personal, especialmente por Jorge Luis Ochoa, quien había compartido tiempo con él en Colombia.

La vida de Barry Seal ha inspirado numerosas producciones. En 1991, HBO estrenó Doublecrossed, con Dennis Hopper como Seal, que retrata al piloto como un aventurero traicionado por las autoridades. En 2017, Tom Cruise protagonizó American Made (titulada Barry Seal: El traficante en España), dirigida por Doug Liman. Aunque la película toma libertades creativas, como exagerar el carisma de Seal o incluir eventos no verificados, captura la esencia de su vida entre el crimen y el espionaje. Seal también apareció brevemente en series como Narcos y Pablo Escobar, el patrón del mal (bajo el nombre Harry Beal).

• Dato curioso: La hija de Seal demandó a Universal Pictures, alegando que no había autorizado el uso de la historia de su padre en American Made. Además, durante el rodaje en Colombia, una avioneta se estrelló, matando a dos tripulantes, lo que añadió controversia a la producción.

Barry Seal es una figura polarizante. Para algunos, fue un héroe que arriesgó su vida para combatir el narcotráfico como informante. Para otros, fue un oportunista que se enriqueció a costa del crimen y traicionó a todos los bandos. Su historia refleja las complejidades de la Guerra Fría, donde los límites entre la ley, el crimen y la política se difuminaban. Como dijo el director Doug Liman, Seal fue un "héroe improbable" que llevó al gobierno estadounidense por un "viaje increíble".

• Dato curioso: A pesar de su vida de traficante, Seal se presentaba como un hombre hogareño, dispuesto a hacer cualquier cosa por su esposa Lucy y sus cinco hijos, lo que contrastaba con su imagen de aventurero temerario.