La anaconda,la serpiente más pesada del mundo y una de las más grandes.

Autóctona de Sudamérica, con sus casi 9 metros de largo llega a alcanzar la longitud de un autobús.

Al hablar de "anaconda", hablamos de la más grande de 4 especies de anaconda, la anaconda verde, un impresionante e intimidante animal semiacuático de 250 kg de peso.

A estos animales les encanta el agua. Su género, Eunectes, significa "buen nadador". Es habitual que sólo asomen fuera del agua los ojos y las fosas nasales, quedando casi completamente sumergidas para emboscar a sus presas.

Estos monstruos sin embargo, no son venenosos, sino constrictores, es decir, se enrollan alrededor de sus presas y con su increible fuerza cortan su riego sanguíneo, hasta que el corazón de su víctima se para, y es entonces cuando las anacondas, como otras serpientes constrictoras, lo notan, se detienen y devoran entera a su presa, ayudándose de la especial anatomía de su boca, con ligamentos elásticos y articulaciones móviles.

En la parte superior de la boca tienen 2 hileras de dientes orientados hacia atrás, que se mueven independientemente a la hora de morder a sus presas y desplazar la cabeza sobre su comida.

Sin embargo, comerse asi a una presa crea un problema, ¿cómo respiran? Pues con una adaptación evolutiva muy curiosa, que comparten las serpientes constrictoras: la tráquea, normalmente junto a la garganta, en el caso de estas serpientes sale de la boca como un tubo de buceo, permitiendo a la anaconda respirar.

Respirar con normalidad es muy importante ya que tardan mucho tiempo (varias horas) en engullir a sus presas debido a su tamaño, y alrededor de una semana en digerirlas.

Es predadora de capibaras e incluso de jaguares, presas que le aportan energía para mantener su gigantesco tamaño. Una vez digeridas, puede tardar en volver a comer semanas o meses.

En el caso de las hembras, el 30% de su peso se emplea para la reproducción, por tanto este tipo de presas grandes son fundamentales.

A diferencia de otras serpientes, las anacondas no ponen huevos, sino que sus crías eclosionan dentro de su madre y luego ésta da a luz. Tras 7 meses de gestación, la madre devorará los huevos no desarrollados y las crías que nazcan muertas para reponer energías.

Con una media de 20-40 crías por camada, éstas son capaces de sobrevivir de forma autónoma, sin las atenciones de su madre, ya que ya nacen con los instintos de caza y autodefensa "de serie", y se convertirán en gigantes en las aguas y selvas de la Amazonia sudamericana.

Sin duda unos animales impresionantes que no nos gustaria encontrarnos mientras nos bañamos...