Para los que sean golosos, si alguna vez visitan la bella San Marino, han de probar su postre más típico, la Torta tre Monti (representativo de las Tres Torres de San Marino), una delicia que se elabora de forma totalmente artesanal.

En realidad es algo bastante sencillo a la par que delicioso, son obleas waffles redondas y suaves, rellenas de crema de cacao y avellanas que se superponen en varias capas y que se terminan con una corona exterior de chocolate negro.

La Torta tre Monti forma parte de la repostería tradicional de esta pequeña República, y se elabora con ingredientes naturales y sin conservantes, resultando un producto de una larga vida útil (ya saben, ideales para llevárselo a casita o para la familia!).

Se elabora con las mismas técnicas artesanales utilizadas desde 1942, a mano, en La Serenissima Cake Factory. Las obleas se preparan primero por medio de planchas de obleas especiales, luego se rellenan con crema y posteriormente se cubren con fondant de chocolate por los hábiles trabajadores de la fábrica. Grandes cubas de crema caliente y fondant de chocolate conforman la imagen más común en las fábricas que elaboran estos dulces.

Normalmente se sirven como bocaditos en cualquier momento y, a menudo, se sirven acompañadas de café caliente. También son un elemento popular en las cestas de regalo gourmet. A veces se cubren con helados para crear postres atractivos.

Estoy seguro de que no les defraudarán...