Hace poco descubrí esto y me ha parecido flipante, algo que sólo puedo definir como curioso dentro de lo curioso, y cómo no, tenía que compartirlo aquí en Vicmun.
Cuando el Servicio Postal de la Oficina de Correos de los Estados Unidos comenzó oficialmente su andadura el 1 de Enero de 1913, de repente permitió a millones de estadounidenses un gran acceso a todo tipo de bienes y servicios. Pero casi de inmediato, tuvo algunas consecuencias no deseadas, incluso increíbles...
En poco tiempo, este servicio adquirió tal fama por su seguridad y eficiencia que los ciudadanos se animaron a enviar casi cualquier cosa, y esto llegó hasta tal punto que empezó a ser usado para cosas insólitas, como el traslado de niños (si si, no es coña, esto ocurrió).
No era una práctica regular, por supuesto, pero estarán de acuerdo conmigo en que insólita sí que era, y hasta el día de hoy han llegado casos documentados.
Aunque parezca una broma, no lo es, y de hecho, por entonces, calculando el precio por kilo que manejaba el servicio postal, era incluso más económico que los métodos ortodoxos de transporte.
Esta práctica se volvió tan popular entre los usuarios del Servicio Postal de los Estados Unidos que la Dirección General de Correos tuvo que prohibir expresamente el envío de seres humanos por paquete postal, para evitar los riesgos que esto podía conllevar.
Como digo, hasta nuestros días han llegado varios casos conocidos, como por ejemplo el de Charlotte May Pierstorff, que en Febrero de 1914, siendo una niña de 6 años, fue enviada por sus padres desde Grangeville, Idaho, a casa de sus abuelos, a unos 117 kilómetros de distancia (la historia fue tan curiosa que se convirtió en un libro para niños, "Mailing May" (y es que el franqueo era más barato que un billete de tren). La pequeña viajó acompañada por el primo de su madre, quién “casualmente” trabajaba en el servicio de correos ferroviario.
Otro caso fue el de un bebé de 8 meses, James, que viajó, en 1913, con el cartero, desde la casa de sus padres, en Ohio, hasta la de sus abuelos, a pocos kilómetros, en Batavia, traslado que les costó unos 15 centavos. O por ejemplo también está el caso de Edna Neff, de 6 años, que viajó en el tren correo desde Florida hasta Virginia.
Esta insólita práctica del Servicio Postal comenzó a abandonarse cuando una niña de 3 años fue devuelta por sus abuelos a casa de sus padres, algo que mediáticamente supuso un escándalo en la época, así que los carteros decidieron acatar la prohibición de envíos humanos por correo.
Oficialmente, el 14 de junio de 1920, varios periódicos, entre ellos el Washington Post o el New York Times, anunciaban que el director de la Oficina de Correos había decretado oficialmente que los niños ya no podían enviarse como paquetes.
me quedo helada...😲
alucino con la historia...
y mucho tardaron en darse cuenta de que podian surgir problemas...🤣
madre mia...🤦♂️
venga ya...😲😲