Los Pontones,  cárceles flotantes de Cádiz, dónde 17.000 hombres fueron encarcelados y enviados al Golfo de Cádiz y anclados a sus aguas durante la Guerra de Independencia contra Francia. 

Los hombres allí encarcelados se paseaban desnudos esperando los suministros que llegaban tarde la mayoría de las veces; hervían la comida en agua salada añadiendo guarniciones de cabos, cordones, cuerdas; muchas veces  observados por las gentes de Cádiz que se acercaban a curiosear con sus barcas.

Los cadáveres de los presos aparecían por distintos puntos de la ciudad por lo que se prohibió tirarlos por la borda y pasaron a enviar una barca a recogerlos.