El ocultismo engloba creencias y prácticas que buscan acceder a conocimientos o poderes "ocultos", más allá de la comprensión científica o las religiones establecidas. Derivado del latín occultus (escondido), se centra en realidades invisibles, como fuerzas cósmicas, entidades espirituales o verdades esotéricas, a menudo reservadas para iniciados. Combina misticismo, magia y filosofía, diferenciándose de las religiones organizadas por su falta de dogmas estrictos y del esoterismo general por su énfasis en prácticas activas, como rituales o adivinación. Históricamente, ha sido venerado como fuente de sabiduría y condenado como herejía, dependiendo del contexto cultural.

Orígenes históricos

El ocultismo tiene raíces en las primeras civilizaciones. En Mesopotamia, los sacerdotes usaban la astrología para interpretar los designios divinos, mientras que en Egipto antiguo, la magia (heka) se empleaba en rituales para proteger a los vivos y guiar a los muertos en el más allá. En Grecia, los oráculos de Delfos y los cultos mistéricos, como los de Eleusis, reflejaban un interés por lo sobrenatural, combinando adivinación y experiencias místicas.

En la Edad Media, la cábala judía exploraba los misterios de la Torá a través de los sefirot (emanaciones divinas), influyendo en místicos cristianos y musulmanes. La alquimia, practicada en el mundo árabe y luego en Europa, buscaba la transmutación de metales y la iluminación espiritual, con textos como el Emerald Tablet atribuidos al mítico Hermes Trismegisto. El hermetismo, basado en el Corpus Hermeticum, fusionó misticismo, astrología y magia, sentando las bases del ocultismo occidental.

El Renacimiento revitalizó estas ideas. Marsilio Ficino tradujo textos herméticos y neoplatónicos, mientras que Pico della Mirandola integró la cábala en el pensamiento cristiano, promoviendo la noción de que el ser humano podía ascender espiritualmente mediante el conocimiento esotérico. Los grimorios, como el Clavicula Salomonis, detallaban invocaciones y símbolos, sistematizando la magia.

El ocultismo moderno se consolidó en los siglos XIX y XX. La Teosofía, fundada por Helena Blavatsky en 1875, combinó filosofías orientales (hinduismo, budismo) con esoterismo occidental, atrayendo a intelectuales. La Hermetic Order of the Golden Dawn (1888), con miembros como Aleister Crowley y W.B. Yeats, desarrolló sistemas complejos de magia ritual. El espiritismo, popularizado por las hermanas Fox en 1848, buscaba contactar con los muertos, influyendo en diversos estratos sociales.

Prácticas principales

El ocultismo abarca prácticas diversas, cada una con su historia y propósito. A continuación, se detallan las más destacadas:

Magia ritual

La magia ritual consiste en ceremonias estructuradas para canalizar energías, invocar entidades o alterar la realidad. Se basa en correspondencias cósmicas, como asociar planetas con colores o metales. El Libro de Abramelin, un grimorio medieval, describe un ritual de seis meses para contactar al "Ángel Guardián". La Golden Dawn popularizó rituales como el Ritual Menor del Pentagrama, usado para purificar espacios o invocar fuerzas elementales. Estas prácticas requieren preparación, intención y, a menudo, objetos simbólicos como varitas o altares.

Astrología

La astrología interpreta los movimientos celestiales para comprender el destino humano o guiar decisiones. Originada en Babilonia, fue codificada en Grecia por Ptolemy en su Tetrabiblos. En el ocultismo, se usa para mapear el alma, planificar rituales o analizar compatibilidades. Por ejemplo, un ritual bajo la influencia de Venus podría enfocarse en el amor. Hoy, la astrología es accesible a través de aplicaciones como Co-Star o sitios que generan cartas natales personalizadas.

Tarot y adivinación

El tarot, surgido en el siglo XV como juego de cartas, se convirtió en herramienta ocultista en el siglo XVIII, cuando Antoine Court de Gébelin lo asoció con la sabiduría egipcia. Mazos como el Rider-Waite (1910) usan arcanos para explorar el inconsciente o prever el futuro. Otras formas de adivinación incluyen runas, el I Ching y la quiromancia, combinando intuición y simbolismo. Estas prácticas son populares tanto en círculos esotéricos como entre aficionados.

Alquimia

La alquimia, practicada desde la antigüedad grecorromana, buscaba el "opus magnum" (transmutar metales en oro) y la perfección espiritual. Paracelso (siglo XVI) combinó alquimia con medicina, mientras que Carl Jung la reinterpretó como un proceso de autotransformación. Símbolos como el ouroboros o el caduceo siguen inspirando a místicos y artistas, y la alquimia espiritual es central en algunas tradiciones esotéricas.

Espiritismo

El espiritismo, que alcanzó su apogeo en el siglo XIX, busca comunicarse con espíritus a través de médiums, sesiones o tableros ouija. Allan Kardec, con El Libro de los Espíritus (1857), codificó sus principios, atrayendo a millones, incluidos científicos como William Crookes. Aunque menos prominente hoy, el espiritismo persiste en comunidades, especialmente en Brasil y Cuba, donde se mezcla con tradiciones locales.

Sociedades secretas y no secretas relacionadas con el ocultismo

El ocultismo ha estado estrechamente ligado a organizaciones, tanto secretas como públicas, que han preservado, desarrollado o difundido sus enseñanzas. A continuación, se describen algunas de las más relevantes:

Hermetic Order of the Golden Dawn

Fundada en 1888 en Londres, esta sociedad secreta es una de las más influyentes en el ocultismo moderno. Combinaba cábala, astrología, tarot y magia ritual, con un sistema de iniciación jerárquico. Miembros como Aleister Crowley, W.B. Yeats y Israel Regardie contribuyeron a su legado. Aunque disuelta en su forma original, sus enseñanzas influyen en grupos esotéricos actuales y en prácticas como el tarot moderno.

Sociedad Teosófica

Fundada en 1875 por Helena Blavatsky, esta organización no secreta buscaba sintetizar filosofías orientales y occidentales, promoviendo el estudio de religiones comparadas y el esoterismo. Aunque no era exclusivamente ocultista, sus enseñanzas sobre karma, reencarnación y planos astrales influyeron en el ocultismo moderno. La Sociedad sigue activa, con sedes en varios países, y su impacto se ve en el movimiento New Age.

Rosacruces

Los Rosacruces, surgidos en el siglo XVII con textos como Fama Fraternitatis, son una orden mística que combina alquimia, cábala y cristianismo esotérico. Aunque su existencia histórica es debatida, organizaciones modernas como AMORC (Antigua y Mística Orden Rosae Crucis), fundada en 1915, promueven prácticas ocultistas como la meditación y el estudio de simbolismo. Los Rosacruces operan tanto en secreto como públicamente, atrayendo a buscadores espirituales.

Masonería

La Masonería, surgida en el siglo XVII, es una sociedad fraternal con rituales simbólicos que algunos asocian con el ocultismo, aunque su enfoque es más filosófico y moral. Figuras como Albert Pike exploraron conexiones con la cábala y el hermetismo, y los símbolos masones (como el compás y la escuadra) han alimentado especulaciones sobre prácticas esotéricas. Sin embargo, su relación con el ocultismo depende de las logias y sus miembros.

Ordo Templi Orientis

Fundada en 1895 y reformada por Aleister Crowley en el siglo XX, la OTO es una sociedad secreta que combina magia ritual, cábala y el sistema de Thelema, creado por Crowley. Sus prácticas, que incluyen rituales sexuales en algunos grados, son controvertidas y han generado mitos sobre su influencia. La OTO sigue activa, con ramas en varios países, y atrae a quienes buscan un ocultismo estructurado.

Wicca y neopaganismo

La Wicca, desarrollada en los años 1940 por Gerald Gardner, es una religión neopagana no secreta que incorpora magia ritual, culto a la naturaleza y prácticas ocultistas como la astrología y el tarot. Aunque no todas las brujas son ocultistas, la Wicca ha popularizado rituales como los sabbats y el uso de altares. Otros grupos neopaganos, como los druídicos, también integran elementos ocultistas, adaptándolos a contextos modernos.

Estas sociedades, secretas o no, han moldeado el ocultismo, ya sea como guardianas de conocimientos esotéricos o como plataformas para su difusión. Sin embargo, las teorías conspirativas sobre su influencia (por ejemplo, los Illuminati) suelen ser exageraciones sin base histórica.

El ocultismo en la sociedad actual

El ocultismo sigue siendo relevante, adaptándose a los contextos modernos:

Cultura popular

El ocultismo impregna el entretenimiento. Películas como The Witch (2015) y Midsommar (2019) exploran temas esotéricos, mientras que series como Chilling Adventures of Sabrina reimaginan la magia con enfoques contemporáneos. En la literatura, desde H.P. Lovecraft hasta Neil Gaiman, los símbolos ocultistas son recurrentes, normalizando conceptos como grimorios o rituales.

Movimiento New Age

El New Age, surgido en los años 60, ha integrado prácticas ocultistas como el tarot, la astrología y los cristales, con un enfoque en el autodesarrollo. Tiendas esotéricas venden amuletos y libros, y eventos como ferias espirituales reúnen a practicantes. Sin embargo, el New Age es criticado por su comercialización y por apropiarse de tradiciones culturales sin contexto.

Redes sociales

Plataformas como Instagram y TikTok han revitalizado el ocultismo. Creadores como @thewitchesbox ofrecen tutoriales de rituales, mientras que cuentas de astrología como @notallgeminis atraen millones de seguidores. Hashtags como #WitchTok y #TarotReading generan millones de vistas, mostrando lecturas de cartas, rituales de luna llena y guías de magia. 

Círculos académicos y artísticos

El ocultismo influye en la academia y el arte. Historiadores como Frances Yates han estudiado su impacto en el Renacimiento, mientras que artistas como Marina Abramović incorporan simbolismo esotérico en sus obras. Exposiciones como The Occult (MoMA, París, 2022) exploran su legado cultural. Editoriales reeditan grimorios, atrayendo a lectores eruditos.

Influencia de las sociedades

Sociedades como AMORC y la Sociedad Teosófica siguen activas, ofreciendo cursos y publicaciones. La Wicca y el neopaganismo han crecido, con comunidades que organizan festivales como Beltane. Aunque grupos como la OTO son menos visibles, su influencia persiste en círculos esotéricos. Las especulaciones sobre la Masonería o los Illuminati, aunque populares, carecen de evidencia sólida.

El ocultismo enfrenta críticas por ser visto como pseudociencia o escapismo. Su comercialización, como la venta de "kits de brujería" en cadenas como Amazon, genera debates sobre autenticidad. En contextos religiosos, algunos lo asocian con prácticas peligrosas, aunque estas percepciones suelen basarse en malentendidos.

Desde sus orígenes en la antigüedad hasta su renacimiento digital, refleja la fascinación humana por lo desconocido. Las sociedades secretas y no secretas han jugado un papel clave en su desarrollo, preservando conocimientos y adaptándolos a nuevos contextos. Ya sea en rituales antiguos, redes sociales o galerías de arte, el ocultismo nos invita a explorar los límites de la realidad y el espíritu.