Mi corazón emparchado de adioses
busca en el atardecer tu figura clandestina
sin fronteras sentimentales
ave sedienta de soles nuevos
incierta de noches curiosas
esas que se pierden en inviernos fugaces
embaucadora de otoños infelices
veo tus pasos alejarse
como otros pasos leves
buscando primaveras
deseosos escapando a mi hastío de seriedades
implacables al romance sin abismos
eres viento de verano
enfrentando caminos
y yo soy un soñador atrapado en tus redes.