En el corazón del paisaje prehistórico de Wiltshire, Inglaterra, se alza majestuoso y enigmático Stonehenge, un monumento megalítico que ha dejado perplejas a generaciones enteras de arqueólogos, científicos y entusiastas de la historia durante   años. Quién construyó Stonehenge sigue siendo un misterio que ha dado lugar a todo tipo de teorías.

Stonhenge, una palabra que evoca imágenes de inmensas piedras alineadas en un círculo, es un tesoro arqueológico que data de hace más de 4.000 años. La estructura está compuesta por dos tipos principales de piedras: las sarsen, colosales bloques de arenisca que conforman su estructura principal, y las piedras azules, más pequeñas pero igualmente enigmáticas, que se cree que fueron transportadas desde Gales. Este sitio megalítico ha sido fuente de admiración y especulación desde tiempos inmemoriales.

Las teorías acerca de los constructores de Stonehenge

Teoría Tradicional: Los druidas y su vínculo legendario

Durante siglos, la teoría más popular que rodea a Stonehenge atribuyó su construcción a los druidas, una antigua orden religiosa celta. Esta creencia se fundamentaba en la falta de datos concretos acerca de su construcción y función. Dado que los druidas eran conocidos por su espiritualidad y su conexión con monumentos megalíticos, era natural creer que eran los maestros constructores detrás de Stonehenge. Sin embargo, esta teoría ha sido ampliamente desacreditada por investigadores y estudios arqueológicos posteriores.

Teoría Moderna: arquitectos desconocidos en la Prehistoria

La opinión académica actual, al menos la más generalizada, sostiene que Stonehenge fue erigido por una cultura prehistórica que precedió a los druidas. Las excavaciones y dataciones por radiocarbono han establecido que Stonehenge se construyó en varias fases a lo largo de más de 1.500 años, comenzando aproximadamente en el 3100 a.C. Esta evidencia indica que diversos grupos de personas contribuyeron a su construcción a lo largo del tiempo.

Los constructores de Stonehenge

Los constructores Iniciales: Cultura de los constructores de fosos

Los constructores originales de Stonehenge pertenecían, parece ser, a la cultura de los constructores de fosos, quienes dieron forma a los fosos y terraplenes circulares que rodean el monumento, creando así su característica disposición. Utilizando herramientas rudimentarias de piedra y hueso, estos antiguos ingenieros de la prehistoria excavaron y movieron toneladas de tierra para construir una zanja circular con un diámetro de aproximadamente 110 metros.

El Misterio de las Piedras Azules de Gales

Uno de los mayores misterios de Stonehenge es cómo las piedras azules llegaron a Stonehenge desde Gales, ubicado a más de 200 kilómetros de distancia. La evidencia sugiere que estas piedras fueron transportadas a lo largo de ríos y luego a través de una red de caminos de tierra. Este logro monumental habría requerido una inmensa fuerza laboral y una planificación detallada, lo que indica la presencia de una sociedad altamente organizada y avanzada desde el punto de vista de la ingeniería.

Maestros constructores de las Piedras Sarsen

Las enormes piedras sarsen, que forman la columna vertebral de Stonehenge, también plantean un enigma. Estas impresionantes piedras fueron extraídas de canteras en las cercanías de Marlborough Downs, a unos 40 kilómetros al norte de Stonehenge. La teoría más aceptada sugiere que fueron transportadas utilizando trineos, troncos de árboles y un ingenioso sistema de rodillos. La magnitud de este esfuerzo logístico implica una sociedad altamente organizada y habilidosa en ingeniería.

La Función de Stonehenge: ¿Templo, Cementerio o Centro de Curación?

La función de Stonehenge ha desconcertado durante años a los investigadores tanto como su construcción. Diversas teorías han sido propuestas a lo largo de los años, incluyendo:

Templo Religioso y Observatorio Astronómico

Muchos académicos creen que Stonehenge servía como un lugar de rituales religiosos y observación astronómica. Su alineación con los solsticios y los equinoccios respalda la idea de que fue un observatorio celestial, utilizado para determinar momentos clave del año y realizar ceremonias religiosas asociadas con el calendario.

Lugar de Enterramiento y Conmemoración

Otra teoría sostiene que Stonehenge fue un lugar de enterramiento, con tumbas y cenotafios esparcidos por la zona. Los restos humanos encontrados en Stonehenge respaldan esta idea, indicando que pudo haber sido un lugar de conmemoración y culto a los antepasados.

Centro de Curación y Ritual

Algunos investigadores sugieren que Stonehenge podría haber sido un centro de curación, donde las personas buscaban tratamiento para diversas dolencias. La disposición de las piedras y la proximidad a fuentes de agua sugieren que el sitio podría haber sido utilizado para propósitos medicinales y rituales de sanación.

Un enigma que perdura

La construcción de Stonehenge sigue siendo, en pleno siglo XXI, un enigma fascinante que ha cautivado a arqueólogos, historiadores y científicos durante décadas. Aunque no podemos afirmar con certeza quiénes fueron los constructores de Stonehenge, las investigaciones arqueológicas modernas han arrojado luz sobre cómo y cuándo se construyó este monumento icónico.

Stonehenge es un testimonio duradero de la capacidad humana para la planificación, la organización y la construcción en una época en la que las herramientas y los recursos eran limitados en comparación con los estándares modernos. La pregunta de quién construyó Stonehenge seguirá siendo un misterio, pero su legado como uno de los sitios arqueológicos más enigmáticos del mundo perdurará para las generaciones futuras.