La invención de la televisión es el resultado de décadas de innovación y experimentación de varios científicos e inventores. Aunque Philo Farnsworth es a menudo reconocido por su papel fundamental, el camino hacia la televisión moderna es una historia entrelazada de múltiples contribuciones.

A principios del siglo XX, la idea de transmitir imágenes a distancia comenzó a tomar forma. En 1884, Paul Nipkow, un ingeniero alemán, inventó el disco de Nipkow, un dispositivo giratorio que dividía una imagen en una serie de líneas y permitía su escaneo, un concepto esencial para la televisión.

Sin embargo, el avance clave llegó en la década de 1920, cuando Philo Farnsworth, un joven de granja en Utah (EEUU), desarrolló un sistema completamente electrónico para transmitir imágenes. A los 14 años, Farnsworth había esbozado el concepto de televisión basado en el escaneo electrónico mientras trabajaba en el campo.

En 1927, Farnsworth demostró con éxito la primera transmisión electrónica de imágenes. Presentó su patente en 1930, sentando las bases para la televisión moderna. Su diseño utilizaba un tubo de rayos catódicos y un escáner electrónico para convertir las imágenes en señales eléctricas y transmitirlas a distancia.

Paralelamente, Vladimir Zworykin, trabajando para la RCA, desarrolló el iconoscopio en la década de 1920, un tubo de cámara electrónico crucial para capturar imágenes. Su invento, patentado en 1928, allanó el camino para la transmisión efectiva de imágenes televisivas.

La década de 1930 presenció el perfeccionamiento de estos conceptos y la introducción de la televisión al público. La World's Fair de 1939 en Nueva York marcó un hito, presentando sistemas de televisión más avanzados.

Aunque Farnsworth y Zworykin son figuras clave en la historia de la televisión, muchos otros contribuyeron con avances cruciales en la tecnología y la transmisión de imágenes en movimiento.

La televisión se convirtió rápidamente en un elemento central en los hogares de todo el mundo, evolucionando continuamente con mejoras tecnológicas, desde la televisión en blanco y negro hasta las modernas pantallas de alta definición y la transmisión digital.

¿Cómo funciona una televisión?

Captura de la imagen: Todo comienza con una cámara que captura escenas y las convierte en señales eléctricas. En las televisiones modernas, las cámaras digitales capturan la escena y la convierten en datos digitales.

Procesamiento de la señal: Estos datos digitales pasan por un procesamiento. Se dividen en componentes de color (rojo, verde, azul) y se comprimen para reducir el tamaño de los archivos.

Transmisión: Los datos procesados se transmiten a través de ondas electromagnéticas o por cable. En la televisión por aire, estas señales se envían desde estaciones de transmisión a través de antenas.

Recepción: El televisor capta estas señales a través de su antena o mediante un cable. Estas señales se envían al sintonizador del televisor.

Decodificación: El sintonizador decodifica las señales y las envía a un procesador de video que las convierte en imágenes y las muestra en la pantalla.

Visualización: La pantalla del televisor está compuesta por miles o millones de píxeles. Cada píxel puede cambiar de color y brillo para formar la imagen completa. Las señales recibidas indican cómo deben cambiar estos píxeles para formar la imagen en la pantalla.

Sonido: Al mismo tiempo, las señales de sonido se extraen de la transmisión y se procesan para ser reproducidas a través de los altavoces del televisor.

Control y ajustes: Los usuarios pueden cambiar canales, ajustar el volumen y configurar otras opciones utilizando el control remoto o los botones del televisor.

La televisión funciona combinando la captura, transmisión, recepción y procesamiento de señales de video y audio para mostrar imágenes y reproducir sonido en la pantalla del televisor.