Esta es una historia de lo más curiosa, y me quedé perpleja cuando me la contaron, lo he consultado con algo más de detalle. Les hablo de las termas de agua Radium, en Portugal:

Los primeros datos contrastados que se tienen de las termas son de 1910, cuando se comienza a tener conocimiento de la radioactividad. Además coincide con el inicio de la explotación minera de radio y uranio por parte de la compañia francesa Société d'uranie et Radio en Portugal..

Las termas se llamaban Radium porque sus tratamientos se basaban el las aguas radiactivas con alto contenido en radio. Debido a la gran demanda de productos con radiactividad, las embotelladoras de agua y los centros de terapia con agua comenzaron a pelearse para demostrar cuál de sus aguas eran las más radiactivas.  

Durante la II Guerra Mundial se comenzó a hablar de los efectos negativos de la radiactividad, lo que llevó a un estudio de la misma determinando que los tratamientos con aguas radiactivas podrían ser perjudiciales para la salud. Hasta el momento no sólo se creía que la radiactividad era inofensiva, sino que era una de las mejores medicinas para cualquier mal.  

Al principio desde las autoridades competentes sólo se daba el consejo de no usar estas aguas, pero ninguna prohibición. 

Increíblemente, debido a la fiebre por la radiactividad, se atribuían a estas aguas propiedades curativas. En los esloganes se anunciaban las aguas Radium como las más radiactivas de Portugal, y una de las más radiactivas del mundo. Y no era sólo publicidad, puesto que en 1997 estas aguas fueron catalogadas como unas de las mas radiactivas en el Congreso de las aguas de Lyon. Anunciaban que con unas sesiones en el balneario podias salir recuperado de casi todas las dolencias...

Ante tan grandes promesas la gente se volvía loca por conseguir elementos radiactivos, desde cremas para la cara hasta juguetes infantiles. La fiebre dura hasta los años 80, aunque durante la II Guerra Mundial se avisaba de los problemas que podía traer la exposición a la radiactividad. No obstante, se seguían vendiendo y produciendo elementos radiactivos, lo cual produjo muchas muertes sobre todo entre los trabajadores de estas fábricas.

Poco a poco se fueron conociendo los efectos nocivos de la radiactividad y dejando de fabricar estos productos.

Este lugar se abandonó y con los años ha cambiado de manos para distintos proyectos, sin que hasta ahora, que yo sepa, se haya concretado ninguno...