Los científicos han sido las fuerzas motoras detrás de los avances más importantes de la humanidad, desde la teoría de la relatividad hasta la evolución. Sin embargo, estos genios no solo se definen por sus contribuciones científicas. Cada uno de ellos tuvo una vida personal repleta de curiosidades, hábitos excéntricos, y en algunos casos, creencias poco convencionales. Voy a contarles algunas de las facetas más sorprendentes y desconocidas de científicos famosos que cambiaron el mundo.
Albert Einstein
Cuando pensamos en Albert Einstein, la mayoría de nosotros visualizamos a un hombre con un cabello despeinado y una mirada profunda, famosa por revolucionar la física con la teoría de la relatividad. Pero, ¿sabías que este genio que sacudió el entendimiento del tiempo y el espacio no habló hasta los cuatro años?
El "Síndrome de Einstein"
El pequeño Albert era considerado un niño extraño. Sus padres se preocuparon mucho porque no hablaba hasta una edad avanzada, y cuando finalmente lo hizo, tenía problemas para formar frases completas. Algunos expertos creen que Einstein podría haber tenido una forma leve de trastorno del espectro autista, pero lo cierto es que este desarrollo lento es lo que ha inspirado el término "síndrome de Einstein". Este término se utiliza para describir a niños que presentan un retraso en el habla, pero que luego muestran habilidades cognitivas extraordinarias en otros aspectos.
Einstein, el pacifista
A pesar de que su trabajo contribuyó indirectamente a la creación de la bomba atómica, Einstein era un pacifista ferviente. En sus últimos años, fue un crítico abierto de las armas nucleares y abogó por el desarme internacional. Sin embargo, paradójicamente, fue él quien impulsó la creación del Proyecto Manhattan al advertir a Franklin D. Roosevelt sobre el potencial de los nazis de desarrollar una bomba nuclear.
Un descuido con los calcetines
Uno de los datos más excéntricos sobre Einstein es que odiaba usar calcetines. Él mismo lo explicaba diciendo que siempre terminaban rompiéndose, por lo que consideraba más sencillo no usarlos en absoluto. De hecho, en muchas de las fotografías de Einstein, debajo de sus zapatos es probable que no llevara calcetines. Su estilo de vida desaliñado era parte de su personalidad, ya que nunca se preocupó demasiado por su apariencia externa.
Isaac Newton
Isaac Newton, conocido por descubrir la gravedad y por sus leyes del movimiento, es uno de los científicos más influyentes de la historia. Sin embargo, su vida privada revela aspectos aún más sorprendentes que su trabajo científico.
Newton y la alquimia: La búsqueda de la Piedra Filosofal
Mucho antes de que la química y la física fueran disciplinas modernas, Newton dedicó una gran parte de su vida al estudio de la alquimia, una práctica antigua que buscaba transformar materiales y descubrir el elixir de la vida. Específicamente, Newton quería hallar la piedra filosofal, una sustancia legendaria que se creía podía convertir metales comunes en oro. Para Newton, la alquimia no era solo una disciplina mística, sino una forma de entender los secretos más profundos del universo. Hoy en día, aunque esta faceta de su vida es menos conocida, es fundamental para comprender su carácter curioso y su deseo de explorar lo desconocido.
Enfrentamientos con otros científicos
A pesar de su genialidad, Newton no siempre fue fácil de llevar. Era extremadamente reservado, y su carácter explosivo lo llevó a tener tensiones con otros científicos. Un ejemplo famoso es su enemistad con Robert Hooke, con quien tuvo un enfrentamiento sobre la naturaleza de la luz y la prioridad en el descubrimiento de la ley de la gravitación. Después de la muerte de Hooke, algunos sugieren que Newton pudo haber destruido todos los retratos de Hooke para borrar su memoria.
Newton: El científico que desafió el dogma
Newton también tenía una faceta profundamente religiosa. Sin embargo, sus creencias religiosas eran bastante heterodoxas. Aunque nunca hizo públicas sus ideas, Newton no creía en la Trinidad, lo que lo colocaba en conflicto con las enseñanzas de la Iglesia Anglicana. Pasó años estudiando las profecías bíblicas e incluso trató de predecir el fin del mundo, que según sus cálculos ocurriría en el año 2060. Esta devoción religiosa combinada con sus estudios científicos muestra cómo Newton no separaba la ciencia de la espiritualidad.
Marie Curie
Marie Curie no solo fue pionera en la investigación sobre la radiactividad, sino que también fue la primera mujer en ganar un Premio Nobel y la única persona en ganar el Nobel en dos disciplinas distintas: Física y Química. Sin embargo, su éxito vino acompañado de sacrificios y riesgos.
Trabajando con radiactividad sin protección
Curie descubrió los elementos radio y polonio y fue pionera en el estudio de la radiactividad, una palabra que ella misma acuñó. No obstante, en esa época, los científicos no comprendían los peligros de la radiación, y Curie manejaba estos elementos altamente radiactivos sin ninguna protección. A menudo llevaba pequeños frascos de material radiactivo en sus bolsillos y los guardaba en su escritorio. Curie murió a causa de una anemia aplásica, relacionada con su exposición prolongada a la radiación, lo que subraya los peligros que enfrentó sin siquiera saberlo.
Sus manuscritos siguen siendo radiactivos
Hasta el día de hoy, los documentos y cuadernos de Curie están tan contaminados con radiación que se almacenan en cajas de plomo y solo pueden ser manipulados con guantes protectores. Estos textos, un testimonio de sus años de investigación, son peligrosos para quien los manipule, un hecho que muestra lo poco que se sabía en su época sobre los riesgos que conllevaba su trabajo.
Símbolo de perseverancia femenina
Curie enfrentó un fuerte rechazo por parte de la comunidad científica debido a su género. A pesar de ser una de las mentes más brillantes de su tiempo, fue excluida de la Academia de Ciencias de Francia simplemente por ser mujer. A pesar de estas barreras, Curie continuó su investigación y rompió todos los estereotipos de la época, inspirando a generaciones de mujeres a seguir carreras científicas.
Nikola Tesla
Nikola Tesla, un inventor visionario que soñaba con un futuro alimentado por energía inalámbrica, es considerado hoy como uno de los científicos más innovadores y adelantados a su tiempo. Sin embargo, su vida estuvo marcada por la excentricidad, la soledad y la falta de reconocimiento.
Obsesión con el número tres
Tesla era conocido por ser obsesivamente ordenado y meticuloso, pero su obsesión más peculiar era con el número 3. Antes de entrar en cualquier edificio, Tesla caminaba alrededor del bloque tres veces, y prefería hospedarse en habitaciones de hotel cuyo número fuera divisible por tres. Este comportamiento ha llevado a algunos a pensar que Tesla sufría de trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), lo cual afectaba muchos aspectos de su vida cotidiana.
Miedo patológico a los gérmenes
En sus últimos años, Tesla desarrolló una fobia a los gérmenes. Se volvió extremadamente paranoico con respecto a la limpieza, y evitaba estrechar las manos de las personas para no contagiarse de alguna enfermedad. Pasaba horas lavándose las manos de forma compulsiva y siempre exigía que los cubiertos y utensilios que usaba estuvieran perfectamente esterilizados.
Genio no reconocido
A pesar de su inmenso talento, Tesla murió solo y en la pobreza, eclipsado por su rivalidad con Thomas Edison y la falta de apoyo financiero para muchas de sus ideas visionarias. Tesla tenía más de 300 patentes a su nombre, pero muchas de sus innovaciones fueron apropiadas por otros o malinterpretadas por su tiempo. Hoy, es considerado uno de los más grandes inventores de la historia, pero durante su vida, gran parte de su trabajo no fue valorado.
Galileo Galilei
Galileo Galilei es recordado como el padre de la astronomía moderna, pero su vida estuvo marcada por conflictos con la Iglesia Católica y su valiente defensa del modelo heliocéntrico de Copérnico.
Juicio y condena
En 1633, Galileo fue juzgado por la Inquisición debido a su apoyo a la teoría heliocéntrica de Copérnico, que contradecía la visión oficial de la Iglesia, que afirmaba que la Tierra era el centro del universo. A pesar de sus esfuerzos por defender sus descubrimientos, Galileo fue declarado hereje y obligado a retractarse de sus ideas bajo amenaza de tortura. Según la leyenda, después de retractarse, murmuró en voz baja: "Eppur si muove" (Y sin embargo, se mueve), refiriéndose a que, a pesar de las presiones de la Iglesia, sabía que la Tierra realmente giraba alrededor del Sol.
Desarrollo de nuevas tecnologías
Aunque es famoso por sus descubrimientos astronómicos, Galileo también fue un inventor. Desarrolló uno de los primeros telescopios refractores, con el que pudo observar las lunas de Júpiter, los anillos de Saturno y las fases de Venus, proporcionando pruebas clave de que no todo giraba alrededor de la Tierra. También inventó un termómetro primitivo y un compás militar, que eran innovaciones significativas en su tiempo.
Charles Darwin
Charles Darwin, el científico que cambió nuestra comprensión de la vida en la Tierra con su teoría de la evolución por selección natural, tuvo una vida marcada por la duda y el miedo a las repercusiones de sus descubrimientos.
La tardanza en publicar "El Origen de las Especies"
Aunque Darwin había desarrollado su teoría de la evolución durante su viaje en el HMS Beagle en la década de 1830, no publicó su famoso libro "El Origen de las Especies" hasta 1859. Durante más de dos décadas, Darwin temió la reacción de la comunidad científica y, sobre todo, de la Iglesia Anglicana, que rechazaba la idea de que los seres humanos hubieran evolucionado de especies más simples. Darwin sabía que su teoría sería vista como una amenaza a las creencias religiosas de su época, y fue esta preocupación la que lo llevó a retrasar la publicación de su obra más importante.
La influencia de Alfred Russel Wallace
Finalmente, Darwin decidió publicar cuando se enteró de que el naturalista Alfred Russel Wallace había desarrollado una teoría similar de la evolución. Wallace había llegado a las mismas conclusiones que Darwin de manera independiente, lo que hizo que Darwin se apresurara a dar a conocer sus ideas para no perder el crédito por su trabajo. A pesar de la presión, Darwin y Wallace mantuvieron una relación respetuosa, y Wallace incluso apoyó el trabajo de Darwin públicamente.
Los grandes científicos no solo son conocidos por sus descubrimientos, sino también por sus vidas personales llenas de curiosidades y excentricidades. Detrás de cada teoría revolucionaria y cada invento, hay una historia fascinante que nos recuerda que incluso los genios son humanos. Desde las obsesiones de Tesla hasta los desafíos que enfrentaron figuras como Galileo y Darwin, la historia de la ciencia está llena de datos curiosos que nos permiten comprender mejor a estos grandes personajes.
Estoy de acuerdo, cada uno de ellos contribuyó decisivamente a lo que somos hoy....
grandes de la historia, y mención especial creo que merece Tesla...